Washington. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos ha tomado posesión legal de un avión Dassault Falcon 900EX, propiedad de Nicolás Maduro Moros, que operaba para su beneficio y el de sus aliados en Venezuela. La aeronave fue confiscada en la República Dominicana y trasladada al Distrito Sur de Florida a solicitud de EE.UU., debido a violaciones de las leyes de control de exportaciones y sanciones estadounidenses.
El fiscal general Merrick B. Garland declaró: “Esta mañana, el Departamento de Justicia confiscó una aeronave que, según alegamos, fue comprada ilegalmente por US$13 millones a través de una empresa fantasma y sacada de contrabando de los Estados Unidos para ser utilizada por Nicolás Maduro y sus aliados. El Departamento continuará persiguiendo a aquellos que violen nuestras sanciones y controles de exportación para impedir que utilicen recursos estadounidenses para socavar la seguridad nacional de los Estados Unidos“.
El secretario adjunto de Control de Exportaciones del Departamento de Comercio, Matthew S. Axelrod, agregó: “Que esta incautación envíe un mensaje claro: las aeronaves adquiridas ilegalmente en los Estados Unidos para beneficio de funcionarios venezolanos sancionados no pueden simplemente volar hacia el horizonte. No importa lo lujoso que sea el jet privado o lo poderosos que sean los funcionarios, trabajaremos incansablemente con nuestros socios aquí y en todo el mundo para identificar y devolver cualquier aeronave contrabandeada fuera de los EE.UU.”.
El fiscal federal Markenzy Lapointe para el Distrito Sur de Florida señaló que esta confiscación ilustra el compromiso inquebrantable de hacer cumplir las leyes de control de exportaciones e imponer sanciones estadounidenses. Destacó que esta acción fue posible gracias a la coordinación y ejecución por parte del Gobierno de los Estados Unidos, con el apoyo crucial de las autoridades en la República Dominicana.
Anthony Salisbury, agente especial a cargo de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) Miami, expresó que esta incautación es otra acción significativa contra las actividades ilegales del régimen de Maduro, resaltando el alcance global de HSI y su compromiso con la aplicación de sanciones de EE.UU. y la detención del flujo de ingresos ilícitos generados por la corrupción pública extranjera.
En agosto de 2019, el Presidente de EE.UU. emitió la Orden Ejecutiva 13884, prohibiendo a las personas estadounidenses participar en transacciones con personas vinculadas al Gobierno de Venezuela, incluyendo miembros del régimen de Maduro. Esta orden se complementa con controles de exportación impuestos por el Departamento de Comercio para artículos destinados a usuarios finales militares o de inteligencia militar venezolanos.
La investigación del gobierno estadounidense reveló que a finales de 2022 y principios de 2023, personas afiliadas a Maduro utilizaron una empresa fantasma en el Caribe para ocultar su participación en la compra ilegal del Dassault Falcon 900EX, valorado en 13 millones de dólares. La aeronave fue exportada de forma ilícita de los EE.UU. a Venezuela en abril de 2023, y desde mayo de 2023 ha sido utilizada principalmente para el beneficio de Maduro, incluyendo su transporte en visitas a otros países.
El caso está siendo investigado por la Oficina de Seguridad Industrial y Comercio del Departamento de Comercio de EE.UU. en Miami, junto con la Fuerza de Tarea El Dorado de la HSI en Miami. Joshua Paster, Jorge Delgado y Ahmed Almudallal son los fiscales a cargo, con el apoyo de la Oficina de Asuntos Internacionales del Departamento de Justicia y la HSI en Santo Domingo. Los Estados Unidos expresan su gratitud a la República Dominicana por su colaboración en este caso.
La responsabilidad de probar la confiscabilidad en un procedimiento de decomiso recae sobre el gobierno.
