El equipo de investigación de ESET enfatiza la necesidad de implementar buenas prácticas de seguridad y protección de datos en cualquier entorno, ya sea empresarial o residencial.
SANTO DOMINGO. – En un contexto donde la tecnología avanza rápidamente y el uso de datos biométricos se vuelve cada vez más común, expertos de ciberseguridad de ESET, empresa líder en detección proactiva de amenazas, advierten sobre la importancia de vigilar el manejo de estos datos sensibles.
Los datos biométricos, como la biometría facial utilizada para acceder a ciertos lugares, contienen información aún más detallada que los datos personales convencionales, pudiendo revelar características étnicas, convicciones religiosas e incluso aspectos relacionados con la salud de las personas. Por ello, se exige que sean tratados con la máxima discreción y protección.
Según la legislación actual, los datos biométricos pueden ser tratados con normalidad siempre y cuando se cumplan ciertos requisitos, como el consentimiento explícito del interesado y el cumplimiento de obligaciones para proteger dichos datos. Sin embargo, es fundamental que exista una comunicación clara con los usuarios sobre las alternativas de acceso y el tratamiento de sus datos.
Daniel Cunha Barbosa, Investigador de Seguridad Informática de ESET Latinoamérica, destaca la importancia de ofrecer alternativas de acceso para aquellos que se nieguen a proporcionar sus datos biométricos. Estas alternativas pueden incluir el uso de huellas dactilares, tarjetas de proximidad (NFC), PIN numéricos o incluso llaves físicas.
El equipo de investigación de ESET enfatiza la necesidad de implementar buenas prácticas de seguridad y protección de datos en cualquier entorno, ya sea empresarial o residencial. Esto incluye garantizar que los dispositivos biométricos estén protegidos con software de ciberseguridad robusto, como antivirus, y asegurarse de que los usuarios hayan dado su consentimiento para el tratamiento de sus datos.
En el caso de las empresas, se recomienda instruir a los empleados sobre la importancia de ofrecer formas alternativas de acceso más allá de la biometría y garantizar que todos los dispositivos y sistemas estén debidamente protegidos.
